“Aunque ha habido esfuerzos importantes del gobierno como el programa de Familias Guardabosques, hay preocupación porque iniciativas que tienen el propósito de generar procesos productivos que le den sostenibilidad a las familias que abandonaron los cultivos ilícitos, tienen algunas dificultades, lo que hace temer su retorno a la siembra de coca”, le dijo a EN PÚBLICO, el Secretario de Gobierno de Santander, Luis Fernando Cote Peña.A lo anterior se suma que a finales del año 2007, más de 5.000 familias santandereanas erradicaron voluntariamente sus cultivos ilícitos esperando 4.500 cupos del programa Familias Guardabosques, que aún no llegan.
El gobierno del departamento le está pidiendo al gobierno nacional que amplíe los cupos de familias guardabosques y revise las estrategias productivas para estas familias, con el fin de lograr la meta de CERO COCA EN SANTANDER.
Sin embargo el incumplimiento en estos programas de más de un año, hace pensar que muchas de estas familias han podido regresar a la siembra de cultivos ilícitos, dijo finalmente Cote Peña.
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